miércoles, 15 de agosto de 2018

tqm mrc

Escrito por: @antropotiroidea


Estaba viendo hacia dentro de mi.
Era eso o aventarme desde un puente sin botón de auxilio antisuicida.


Siempre quise ser habitada por insectos.
Los encontré.


Las mariposas bailaban charanga y un escorpión la hacía de contorsionista
...
tan parecido al amor:
La vorágine y la lucha contra sí mismo.


La modernidad trae consigo atajos para el romance que sistematizan el enamoramiento,
dos mil dieciocho:
creemos que Luis Miguel es un dios,
“un Sol en un pueblo azteca”;
usamos Netflix para ver Televisa pero desde un servicio de paga;
nos entra el pack antes del par de frases que marcarán un fin siniestro;
tarareamos igual que el Padre Nuestro:
“Se nos va acabando el trago
sin saber qué es lo que hago
si contengo mis instintos
o jamás te dejo ir…”


Después volvemos a la cordura,
a retomar el papel vulnerable,
es mainstream cantar las de 1997 pero no pensar así,
ahora tenemos un smartphone,
feminismo y tiempo aire:
denunciamos por Twitter
lo que antes fue amor romántico.


Regresamos a la calma,
al mood de muerte chiquita,
crowdfunding de maestría y viajes a París,
tqm mrc

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Sueño ligero